1.3.14

SILENCIO








ESTE GIF DE MAFALDA ILUSTRA LA CÉLEBRE LEYENDA JAPONESA SAN SARU DE LOS TRES MONOS SABIOS O MÍSTICOS: QUE SUGIERE QUE PARA LLEGAR A LA SABIDURÍA HAY QUE NEGARSE A: ESCUCHAR MALDADES, A DECIR MALDADES Y A VER MALDADES.


REGALO (LEONARD COHEN)

Me dices que el silencio
está más cerca de la paz que los poemas,
pero si como un regalo
yo te ofreciera el silencio
(porque yo sé lo que es el silencio)
tu dirías
"Esto no es el silencio
es otro poema"
y me lo devolverías.

A CALLARSE (PABLO NERUDA)
RECITADO POR ISMAEL SERRANO
Ahora contaremos doce

y nos quedamos todos quietos.

Por una vez sobre la tierra

no hablemos en ningún idioma,

por un segundo detengámonos,

no movamos tanto los brazos.

Sería un minuto fragante

sin prisa, sin locomotoras,

todos estaríamos juntos

en una inquietud instantánea.

Los pescadores del mar frío

no harían daño a las ballenas

y el trabajador de la sal

miraría sus manos rotas.

Los que preparan guerras verdes,

guerras de gas, guerras de fuego,

victorias sin sobrevivientes,

se pondrían un traje puro

y andarían con sus hermanos

por la sombra, sin hacer nada.

No se confunda lo que quiero

con la inacción definitiva:

la vida es sólo lo que se hace,

no quiero nada con la muerte.

Si no pudimos ser unánimes

moviendo tanto nuestras vidas,

tal vez no hacer nada una vez,

tal vez un gran silencio pueda

interrumpir esta tristeza,

este no entendernos jamás

y amenazarnos con la muerte,

tal vez la tierra nos enseñe

cuando todo parece muerto

y luego todo estaba vivo.

Ahora contaré hasta doce

y tú te callas y me voy.

POEMA 15 (PABLO NERUDA)
CANTADO POR MERCEDES SOSA
LEÍDO POR SU AUTOR

Me gustas cuando callas porque estás como ausente, 
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca. 
Parece que los ojos se te hubieran volado 
y parece que un beso te cerrara la boca. 

Como todas las cosas están llenas de mi alma 
emerges de las cosas, llena del alma mía. 
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma, 
y te pareces a la palabra melancolía. 

Me gustas cuando callas y estás como distante. 
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo. 
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza: 
déjame que me calle con el silencio tuyo. 

Déjame que te hable también con tu silencio 
claro como una lámpara, simple como un anillo. 
Eres como la noche, callada y constelada. 
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo. 

Me gustas cuando callas porque estás como ausente. 
Distante y dolorosa como si hubieras muerto. 
Una palabra entonces, una sonrisa bastan. 
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.

EL SILENCIO (FEDERICO GARCÍA LORCA)


Oye, hijo mío, el silencio. 

Es un silencio ondulado, 

un silencio, 

donde resbalan valles y ecos 

y que inclina las frentes 

hacia el suelo.





DE QUÉ CALLADA MANERA (NICOLÁS GUILLÉN)
CANTADO POR PABLO MILANÉS
VERSIÓN DE PASIÓN VEGA
VERSIÓN DE ANA BELÉN Y DAVID AGUILA
¡De que callada manera

Se me adentra usted sonriendo,

Como si fuera la primavera!

(Yo, muriendo).

Y de que modo sutil

Me derramó en la camisa

Todas las flores de abril.

¿Quién le dijo que yo era

Risa siempre, nunca llanto,

Como si fuera

La primavera?

(No soy tanto).

En cambio, ¡qué espiritual

Que usted me brinde una rosa

De su rosal principal!

De que callada manera

Se me adentra usted sonriendo,

Como si fuera la primavera

(Yo, muriendo)
EL SILENCIO (FRANCISCO LUIS BERNARDEZ)

No digas nada, no preguntes nada.
Cuando quieras hablar,  quédate mudo:
que un silencio sin fin sea tu escudo
y al mismo tiempo tu perfecta espada.

No llames si la puerta está cerrada,
no llores si el dolor es más agudo,
no cantes si el camino es menos rudo,
no interrogues sino con la mirada.

Y en la calma profunda y transparente
que poco a poco y silenciosamente
inundará tu pecho de este modo,
sentirás el latido enamorado
con que tu corazón recuperado
te irá diciendo todo, todo, todo.


TODO POR DECIR (IRMA CUÑA)



Y callando.

Fatiga

desaliento

aliento

del desastre.



Y no querer decir

en el vacío

no urdir nada.

Silencio 

del adentro.



Sólo un vaivén

respiratorio

circulatorio

en la piel

del mundo

ilocutorio.



Y todo por decir...

Quién lo diría.

SILENCIO (CARLOS GARDEL)
Silencio en la noche. 
Ya todo está en calma. 
El músculo duerme. 
La ambición descansa. 

Meciendo una cuna, 
una madre canta 
un canto querido 
que llega hasta el alma, 
porque en esa cuna, 
está su esperanza. 

Eran cinco hermanos. 
Ella era una santa. 
Eran cinco besos 
que cada mañana 
rozaban muy tiernos 
las hebras de plata 
de esa viejecita 
de canas muy blancas. 
Eran cinco hijos 
que al taller marchaban. 

Silencio en la noche. 
Ya todo está en calma. 
El músculo duerme, 
la ambición trabaja. 

Un clarín se oye. 
Peligra la Patria. 
Y al grito de guerra 
los hombres se matan 
cubriendo de sangre 
los campos de Francia. 

Hoy todo ha pasado. 
Renacen las plantas. 
Un himno a la vida 
los arados cantan. 
Y la viejecita 
de canas muy blancas 
se quedó muy sola, 
con cinco medallas 
que por cinco héroes 
la premió la Patria. 

Silencio en la noche. 
Ya todo está en calma. 
El músculo duerme, 
la ambición descansa... 

Un coro lejano 
de madres que cantan 
mecen en sus cunas, 
nuevas esperanzas. 
Silencio en la noche. 
Silencio en las almas...


SILENCIOS (JORGE DEBRAVO)
    Muere un amor en mitad de la esperanza
    Y un silencio sepulta su cadáver de pájaro.
    Sangra una niña herida sobre un lecho lúbrico
    Y un silencio se esconde entre los trapos.
    Degüellan un muchacho en una patria
    Y un silencio se oculta en sus zapatos.
    Cogen la libertad, la escupen, la desangran,
    Y un silencio terrible cierra los campanarios.
    Alguien pone candados en los libros
    Y un silencio se aprieta en los armarios.
    Fusilan un patriota en un rincón oscuro
    Y un silencio se fuga sobre los techos blancos.
    Un millón de niñitos se nos muere de hambre
    Y un silencio se duerme contemplándolos.
20 DE ENERO (LA OREJA DE VAN GOGH)
Pensé que era un buen momento,
por fin se hacía realidad,
tanto oír hablar de tu silencio,
dicen que te arrastra como el mar.
Llené de libros mi maleta,
también de fotos tuyas de antes,
dibujé tu sonrisa junto a la mía,
me dormí con tu abrigo en el sofá

Quiero estar a tu lado,
quiero mirarte y sentir,
quiero perderme esperando,
yo quiero quererte o morir...

Y en el momento que vi tu mirada buscando mi cara,
la madrugada del 20 de enero saliendo del tren,
me pregunté que sería sin ti el resto de mi vida,
y desde entonces te quiero, te adoro y te vuelvo a querer

Cogí un tren que no dormía,
y vi tu cara en un cristal,
Era un reflejo del sol de mediodía,
era un poema de amor, para viajar

Quiero estar a tu lado
quiero mirarte y sentir,
quiero perderme esperando,
yo quiero quererte o morir...

Te perdí
y no te perderé
nunca más te dejaré
Te busqué, muy lejos de aquí (de aquí)
te encontré pensando en mí

En el momento que vi tu mirada buscando mi cara,
la madrugada del 20 de enero saliendo del tren,
me pregunté que sería sin ti el resto de mi vida,
y desde entonces te quiero, te adoro y te vuelvo a querer


EL SILENCIO REDONDO DE LA NOCHE (FEDERICO GARCÍA LORCA)
    El silencio redondo de la noche
    Sobre el pentagrama
    Del infinito.
    Yo me salgo desnudo a la calle,
    Maduro de versos
    Perdidos.
    Lo negro, acribillado
    Por el canto del grillo,
    Tiene ese fuego fatuo,
    Muerto,
    Del sonido.
    Esa luz musical
    Que percibe
    El espíritu.
    Los esqueletos de mil mariposas
    Duermen en mi recinto.
    Hay una juventud de brisas locas
    Sobre el río.
LA SILENCIOSA (JAIRO)
Honda bruma de silencio la empezó a cercar,
y un día al pairo se quedó,
en las ondas aguas sin retorno de ese mar
que su mirada anegó.
Sus caricias que eran mías no volvieron más
del profundo exilio de la soledad.
De que ausencias callarían con su corazón,
de que cenizas del amor,
que partidas tristes o recuerdos sin pasión,
que vigilia del dolor.
Se escondía, le dolía la vida al fin,
la melancolía que deja el vivir.
Silenciosa deshojaba hebra a hebra la quietud.
Sobre su regazo que habitaba la humildad,
en sus manos tibias que hilaron la luz.
Con agujas de suspiros se ponía a tejer,
aquellos recuerdos de madre y mujer.
Han pasado muchos años, pero sigue en mí,
y le he empezado a comprender
esas fugas suyas donde no reconocí,
la mordaza de querer.
Madre mía, sangre mía, de su amor mamé,
y hasta me sorprendo pareciéndome.
Mi silencio y su silencio van buscándose,
ser silencioso no es callar.
Con los años uno aprende a saber decir,
toda el alma sin hablar
Tallo arriba, va la vida, creciendo feliz,
mientras uno va volviéndose raíz.


SILENCIO (OCTAVIO PAZ)
      Así como del fondo de la música
      Brota una nota
      Que mientras vibra crece y se adelgaza
      Hasta que en otra música enmudece,
      Brota del fondo del silencio
      Otro silencio, aguda torre, espada,
      Y sube y crece y nos suspende
      Y mientras sube caen
      Recuerdos, esperanzas,
      Las pequeñas mentiras y las grandes,
      Y queremos gritar y en la garganta
      Se desvanece el grito:
      Desembocamos al silencio
      En donde los silencios enmudecen.
LA PALABRA DICHA (OCTAVIO PAZ)
      La palabra se levanta
      De la página escrita.
      La palabra,
      Labrada estalactita,
      Grabada columna,
      Una a una letra a letra.
      El eco se congela
      En la página pétrea.

      Ánima,
      Blanca como la página,
      Se levanta la palabra.
      Anda
      Sobre un hilo tendido
      Del silencio al grito,
      Sobre el filo
      Del decir estricto.
      El oído: nido
      O laberinto del sonido.

      Lo que dice no dice
      Lo que dice: ¿cómo se dice
      Lo que no dice?
      Di
      Tal vez es bestial la vestal.

      Un grito
      En un cráter extinto:
      En otra galaxia
      ¿Cómo se dice ataraxia?
      Lo que se dice se dice
      Al derecho y al revés.
      Lamenta la mente
      De menta demente:
      Cementerio es sementero,
      Simiente no miente.

      Laberinto del oído,
      Lo que dices se desdice
      Del silencio al grito
      Desoído.

      Inocencia y no ciencia:
      Para hablar aprende a callar.
LE TENGO RABIA AL SILENCIO (ATAHUALPA YUPANQUI)

Le tengo rabia al silencio 
por todo lo que perdí. 
Que no se quede callado 
Quien quiera vivir feliz. 
Un día monté a caballo, 
Y en la selva me metí, 
Y sentí que un gran silencio 
Crecía dentro de mí. 
Hay silencio en mi guitarra 
Cuando canto el yaraví, 
Y lo mejor de mi canto 
Se queda dentro de mí. 
Cuando el amor me hizo señas, 
Todo entero me encendí. 
Y a fuerza de ser callado, 
Callado me consumí. 
Le tengo rabia al silencio 
Por todo lo que perdí, 
Que no se quede callado 
Quien quiera vivir feliz
ESTA VIDA EN SILENCIO (JORGE DEBRAVO)
    Esta vida en silencio
    En la sombra desnuda.
    Cayendo, meditando,
    De machacada y ebria se hace pura.
    Flotas tú restregada
    En el tronco y el nervio.
    Blancos se abren tu voz,
    El viento, el alma,
    Porque esta vida es un milagro abierto.
THE SOUNDS OF SILENCE (SIMON AND GARFUNKEL)












SUBTITULADA
LOS SONIDOS DEL SILENCIO VERSIÓN ESPAÑOL SERGIO DENIS 


VERSIÓN ORIGINAL EN INGLÉS
TRADUCCIÓN EN ESPAÑOL
Hello darkness, my old friend,
I've come to talk with you again.
Because a vision softly creeping
Left its seeds while I was sleeping.
And the vision that was planted in my brain
Still remains within the sounds of silence.
In restless dreams I walked alone
Narrow streets of cobblestone,
'Neath the halo of a street lamp
I turned my collar to the cold and damp
When my eyes were stabbed
By the flash of the neon light, that split the night
And touch the sounds of silence.
And in the naked light I saw
Ten thousand people, maybe more.
People talking without speaking,
People hearing without listening.
People writing songs that voices never share
And no one dared disturb the sounds of silence.
'Fools,' said I, 'you do not know
Silence like a cancer grows.
Hear my words that I might teach you,
Take my arms that I might reach you.
'But my words like silent raindrops fell,
And echoed in the wells of silence.
And the people bowed and prayed
To the neon god they made.
And the sign flashed out its warning
In the words that it was forming.
And the signs said, the words of the prophets
Are written on the subway walls and tenement halls.
And whispered in the sounds of silence.

Hola oscuridad, mi vieja amiga,
He venido a hablar contigo otra vez.
Porque una visión arrastrándose suavemente
Dejó sus semillas mientras estaba durmiendo.
Y la visión que fue plantada en mi cerebro
Todavía permanece dentro de los sonidos del silencio.
En sueños sin descanso caminé solo
Por estrechas calles de empedrado,
Debajo del halo de una luminaria
Me levanté el cuello (de la prenda de vestir) al frío y la humedad
Cuando mis ojos fueron apuñalados
Por el flash de la luz de neón, que resquebraja la noche
Y acaricia los sonidos del silencio.
Y en la luz desnuda ví
Diez mil personas, quizás más.
Gente hablando sin conversar,
Gente oyendo sin escuchar.
Gente escribiendo canciones que las voces jamás compartirán
Y nadie osó molestar a los sonidos del silencio.
'Tontos,' dije, 'no saben
Que el silencio es como el crecimiento de un cáncer.
Escuchen mis palabras que podría enseñarles,
Tomen mis brazos que podría alcanzarlos.
'Pero mis palabras como silenciosas gotas de lluvia cayeron,
E hicieron eco en los pozos del silencio.
Y la gente se inclinó y rezó
Al dios de neón que crearon.
Y el cartel encendió su advertencia
Con las palabras que estaba formando.
Y los carteles decían que las palabras de los profetas
Están escritas en las paredes del subterráneo y en los conventillos.
Y murmuradas en los sonidos del silencio
EL SILENCIO PESADO (EUGENIO DE NORA)

EL silencio pesado,
la música, y el tiempo que hace ahí fuera
la gente de las calles con uniforme o luto,
las cicatrices que miro en tantas almas,
el sol rojizo iluminando cárceles,
ruinas, y ciertos muros, ah, ciertos terraplenes
en las que se incrustaron balas tibias con sangre,
con sorpresas de sangre visitada de pronto;
las condecoraciones , las banderas,
los hombres más providenciales, y los menos,
las noticias que no traen los periódicos,
y las otras interminables, infantiles,
anonadantes cosas de diferente especie,
me sitúan en mí, sin libertad posible,
como una oruga entre batallas:
no hay ojos, pies o manos,
palabras , violines,
con los que ver , tocar, pisar en firme,
escuchar un latido;
al combatido corazón de la vida,
sostenerse en el lomo de ballena furiosa
que revuelven las cosa que pasan.

Yo bien quisiera
hablar con voz más pura de la luna y las flores,
o descifrar en versos mágicos
el color de los ojos de la mujer que amo:
pero ahí está lo otro
un oleaje, una salva de aplausos y disparos,
el mar ronco por las calles.

Yo fui aquél que silenciosamente
besa las rosas y contempla el cielo:
amargos de odio, abiertos como heridas,
desfallecidos, de belleza aguda.
¡Aquí está el alma llena de cadenas,
el ciego sol sobre la mar sin nadie,
tanda espada de música en mi pecho!

Mirad la gente consumiendo vida:
el que trabaja, el que difiere en escupe:
todo lo dicho y más interminable.

Y entre tantos oficios yo soy aquél que mira,
aquél de quien se pide que atestigüe y declare. 

VIDALA DEL SILENCIO (ATAHUALPA YUPANQUI)

Cierta vez en la mañana de un país de montañas 
azules, miraba yo esas nubes pequeñas, que suelen 
quedar como prendidas de las piedras en la mitad 
del cerro. El aire, ausente. Mas arriba, un cielo azul, 
abajo, la tierra dura, y cálida. 

Alguien me dijo unas raras palabras refiriéndose 
a esas nubecitas blancas, quizá lejanas ya, que 
embellecían el paisaje... 
Eso, que usted está mirando, no son nubes, amigo. 

Yo creo que son vidalas olvidadas, esperando que 
alguien comprenda su silencio, entienda su palabra, 
intuya su canción. 

Poco tiempo después de ese momento que no se puede 
traducir cabalmente, porque está más allá de nuestro 
entendimiento, nació la vidala del silencio. 



CALLEMOS (AMADO NERVO)

¡Cuánto, cuánto se habla
sin ton ni son; qué declamar perpetuo
de retóricas nulas!
¿No es mejor por ventura el silencio?

Que el ESPIRITU selle nuestra boca
con sus siete sellos,
y florezcan en paz nuestros enigmas...
¡Callemos, callemos!

¡Oh! la estéril balumba... ¡Y ser la VIDA
tan honda como es! ¡Ser el misterio
tan insondable! Triste afán de ruido

que mancilla lo ETERNO
que palpita en nosotros...
¡Callemos, callemos!

Los ángeles vendrán a reposarse
en las ramas del árbol mudo y quieto,
como divinos pájaros de nieve.
¡Hay tantas cosas que callar con ellos!

Debe callarse todo lo sublime,
todo lo excelso.
Hasta los nombres que a las cosas damos,
empañan el espejo
del SER, en que se mira
el ARQUETIPO, trémulo
de luz, de santidad y de pureza
¡Callemos, callemos!

En el callar hay posibilidades
sin límite, hay portentos
celestes, hay estrellas, más estrellas
que en todo el firmamento.

El alma y Dios se besan, se confunden
y son una sola alma en el inmenso
mar del éxtasis, manso, inalterable. . .
¡Callemos, callemos!
CALLO (FRANCO DE VITA)

Callo 

que lo que no quiero es hacerte daño 

y prometerte un mundo que no existe 

Ya lo ves 

Ni tú ni yo acabamos de nacer 

y los dos sabemos como es esto del amor 

Hoy estamos sin mañana 

Callo 

que lo que no quiero es hacerme daño 

Ay, que este corazón no aguanta un desengaño más 

que han sido tantas heridas por curar 

Que de tanto dar y dar a cambio de na’ 

al final se queda solo 

Callo porque la palabra no define 

lo que llevo adentro 

porque ni uno mismo es dueño de sus sentimientos 

Un buen día todo cambia sin saber por qué 

Callo 

que al final de todo las palabras se las lleva el viento 

y otra vez a solas con nuestros lamentos 

Por eso lo que siento yo me lo callo 

Callo 

que lo que no quiero es hacernos daño 

Que con el amor tú sabes que no se puede jugar 

Hay amores que pueden matar 

Y dejar al tiempo que nos diga la verdad 

porque hoy estamos sin mañana 

Callo porque la palabra no define 

lo que llevo adentro 

Porque ni uno mismo es dueño de sus sentimientos 

y un buen día todo cambia sin saber por qué 

Ay! callo 

que al final de todo las palabras se las lleva el viento 

Y otra vez a solas con nuestros lamentos 

Por eso lo que siento yo me lo callo 

Siento adentro yo, yo, yo me lo callo 

Lo que siento me lo callo 

Siento adentro yo, yo, yo me lo callo, oh, oh, oh, oh 

Para no hacernos daño 

Siento adentro yo, yo, yo me lo callo, oh, oh, oh, oh 

Lo que siento aquí adentro yo me lo callo 

Siento adentro yo, yo, yo me lo callo, oh, oh, oh, oh 

Por que las palabras, las palabras se las lleva el viento 

Se las lleva el viento 

Oh, oh, oh me lo callo 

Lo que siento me lo callo

BOCA MUDA (KETTY ALEJANDRINA LIS)
Boca muda
¿boca-fauces al acecho?
no no
muda
muda
labios en doma y aplanados
brazos como las ramas de un sauce
se confunden y beben la savia de sí mismos
todo musgo las piernas.
Impresiones digitales
¿lenguaje del código genético?
¿cifra de herencia de otras vidas?
ni aquí ni allá somos un nombre 
solo un número o transparencia en clave.
Corre Anikó, mi niña, corre
y ofrécete a quien te ofrezca más
porque tenemos hambre
los circos con enanos y payasos aún no se inventaron
eso vendrá más tarde
cuando se canse el arte de decir que es para todos 
cuando óleos y esculturas
sigan valiendo más que un desdichado
nacido de hembra 
loba solitaria y madre 
andrajos por galas alisando el suelo 
un mar de sal la lengua
de borrachos repletas las tabernas
gritos a granel 
pechos y nalgas manoseados
prodigio de cosechas en las eras 
en los feudos
mendigos en los campos
y mucho vino en jarras de hojalata
atan con un cordón que dobla las esquinas
la vida a la materia
¿Qué es lo real?
¿este rostro con nombre y número en su documento?
¿aquel otro que se cubrió con pieles de carnero
o ese que bajando el puente levadizo de un castillo de Bretaña
salía a cazar ciervos?
¿perteneció a algún clan
luchando por el mismo ideal de William Wallace 
en las montañas de de la vieja Escocia?
¿aulló hasta quebrarse los dientes en la hoguera?
¿usó blusa de fino encaje? ¿gabán de terciopelo?
¿ayudó a preservar algunos alimentos? 
hilera de vasijas 
dádiva de frutas secas
punta 
filo
un puñal 
y la muerte negra y loca
construyendo inexorable la explanada.
- Metzadah, todo se ha perdido 
nada valió nada ni se purificó el desierto 
sólo hemos trazado un círculo engañoso
donde duerme mi cuerpo entre otros cuerpos
pero estoy aún aquí en la planicie 
guardando para mí y protegiendo
la transparente belleza de tu aire -
Todo es sueño soñado en la epidermis y por debajo
el cauce es continuado y se deriva
desde el tramo más caudal del precipicio.
Velo tras velos se espesan y recubren
hilos distintos para la misma urdimbre
añorando la luz que fue el principio del principio
la libertad perdida
la inocencia.
Volver la boca muda
¿para qué al acecho?
miren
tenemos todo aquí
tenemos esta lluvia que corre por encima del rojo-lila-rojo
negro-rojo derramándose en los cuartos
a cielo abierto
miren
tenemos nada aquí
y cómo se hace
tierna tierra maternal ajusticiada
contrapuesta al viaje de regreso
entre un cielo de maleza y un oro de melaza
y cómo se hace
si los brazos-ramas hundidos en el tronco de los sauces
bebiéndose las pestilentes aguas de ellos mismos
van haciendo piruetas igual siglo tras siglo
como si ayer siguiera siendo hoy
hoy
bóveda y sol en la misma curvatura
el cielo y la idea de ese cielo
el agua en alfabeto
el alfabeto nadando sobre el agua
¿la carne es débil?
¿a quién se le ocurrió afirmar a manera de un axioma
tamaña tontería?
la carne es por completo frágil frente al tiempo
él sí que se derrumba débil
línea de flotación delgada 
hundida en el pasado sin palas ni semillas
sin posibilidad alguna de cosechar las mieses.
¿Y cómo se hace sino dejar muda la boca
ajustar tela adhesiva a los dos párpados
y pesar como quien pesa un fardo
el mar de sal de la agotada lengua?
LA CANCIÓN DEL SILENCIO (LEÓN GIECO)
Silencio señores grandes
que despiertan los cuentos del parque
ellos esperan las nuevas risas 
en las treinta vueltas de una calesita 
ellos esperan las nuevas risas 
sobre la esperanza llamada sortija 

Silencio señores grandes 
que despiertan las leyendas 
tal vez pintadas o dibujadas 
en el redondo borde de las plantas 
tal vez pintadas o dibujas 
en el vaiven solitario de una hamaca 

El silencio no es una palabra 
escrita sobre un pared 
es una canción solitaria por el viento 
que no se detiene en el medio de un infierno 
es una canción solitaria por el viento 
que no se detiene en el medio de un infierno 

Silencio señores grandes 
que despiertan las historias 
adormecidas en los parques 
debajo de un tobogán o un banco gris 
adormecidas en los parques 
cobijadas con un copo de maíz 

Silencio señores grandes 
que las dulces fabulas despiertan 
ellas están acurrucadas 
en el bostezo de una hormiga trasnochada 
ellas están acurrucadas 
en el vientre de un mordisco de manzana
SILENCIO (LUCIAN BLAGA)

Tanto silencio me rodea que me parece oír
el choque de los rayos de la luna en la ventana.
Una voz ajena despierta dentro de mi alma
y una canción canta
un ansia que no es mía.
Se dice que los antepasados muertos antes del tiempo
con la sangre aún joven en las venas,
con grandes deseos en la sangre,
con mucho sol en los deseos,
vuelven,
vuelven para vivir todavía un poco más
dentro de nosotros
la vida que dejaron de vivir.
Tanta quietud me rodea que me parece oír
el choque de los rayos de la luna en la ventana.
Ay, quién sabrá, alma mía, dentro de qué pecho
cantarás tú más allá de los siglos,
en las dulces cuerdas del silencio
en arpas de tiniebla, tus ahogados anhelos
y tu vencida alegría de la vida.
¿Quién lo sabrá, quién?
SILENCIO (PEDRO AZNAR)
Silencio
por qué te amo
nada valdrá preguntar
rojo silencio
mundo ignorante
sumido en la oscuridad
negro silencio
luna desnuda
esclava dueña del mar
plata silencio
en tu partida
tu olor se queda en mi piel
blanco silencio


SILENCIO (EDGAR LEE MASTERS)

He conocido el silencio de las estrellas y del mar,
Y el silencio de la ciudad cuando calla,
Y el silencio de un hombre y una mujer,
Y el silencio por el que la música sólo encuentra su palabra,
Y el silencio de los bosques antes de los vientos de la primavera,
Y el silencio de los enfermos
Cuando sus ojos vagan por la habitación.
Y pregunto: ¿Para qué cosas profundas sirve el lenguaje?
Una bestia del campo se queja unas pocas veces
Cuando la muerte se lleva a su cría.
Y nosotros nos quedamos mudos ante realidades de las que no podemos hablar.
Un chico curioso le pregunta a un soldado viejo sentado 
frente a un almacén
--¿Cómo perdiste la pierna?
Y el viejo soldado se queda sin palabras 
o desvía el pensamiento
porque no puede concentrarlo en Gettysburg.
Y vuelve jocoso
Y le dice: Un oso me la comió.
Y el chico se maravilla, mientras el viejo soldado
Mudo, débil, sobrevive a
Los fogonazos de los revólveres, al trueno del cañón,
Los gritos de los asesinados,
Y a él mismo tendido en el suelo,
Y a los cirujanos del hospital, los cuchillos,
Y a los largos días en cama.
Pero si pudiera describir todo esto
Sería un artista.
Pero si fuera un artista debería haber palabras más hondas
Que él no podría describir.
Está el silencio de un gran odio,
Y el silencio de un gran amor,
Y el silencio de una profunda paz interior,
Y el silencio de una amistad traicionada,
Está el silencio de una crisis espiritual,
A través del cual, el alma, exquisitamente torturada,
Llega a visiones que no pueden pronunciarse
En un reino de vida superior.
Y el silencio de los dioses que se entienden sin hablar,
Está el silencio de la derrota.
Está el silencio de los injustamente castigados;
Y el silencio de los agonizantes cuya mano 
de pronto toca la nuestra.
Está el silencio entre el padre y el hijo,
Cuando el padre es incapaz de explicar su vida,
Y por eso mismo resulta incomprendido.
Hay el silencio que crece entre el marido y la mujer.
Hay el silencio de aquellos que fracasaron;
Y el vasto silencio que cubre
A las naciones quebradas y a los líderes vencidos.
Está el silencio de Lincoln,
Pensando en la pobreza de su juventud.
Y el silencio de Napoleón
Después de Waterloo.
Y el silencio de Juana de Arco
Diciendo entre las llamas, "Jesús Bendito"...
Revelando en dos palabras toda la pena, toda la esperanza.
Y hay el silencio de la vejez,
tan lleno de sabiduría que la lengua no pronuncia
las palabras inteligibles para aquellos que no han vivido
La gran extensión de la vida.
Y está el silencio de los muertos.
Si nosotros, vivos, 
no podemos hablar de profundas experiencias,
¿Por qué asombrarse de que los muertos 
no nos hablen de la muerte?
Su silencio será interpretado
Cuando nos acerquemos a ellos.

SILENCIO (LUDWIG VAN BEETHOVEN)
CONCIERTO POR ERNESTO CORTÁZAR



Escucha en silencio (RUMI)

Ensordecido por la voz del deseo,
ni siquiera te das cuenta que el amado
vive en el centro mismo de tu corazón.
Detén todo el ruido
y escucharás su voz
en el silencio absoluto.

En silencio
Ahora permanece en silencio.
Deja que hable, aquel que crea las palabras.
El creó la puerta, el creó el candado,
el creó también la llave.
Deja también que abra tu mente.

POESÍA VERTICAL (ROBERTO JUÁRROZ)
8

El fruto es el resumen del árbol,
el pájaro es el resumen del aire,
la sangre es el resumen del hombre,
el ser es el resumen de la nada.

La metafísica del viento
se notifica de todos los resúmenes
y del túnel que excavan las palabras
por debajo de todos los resúmenes.

Porque la palabra no es el grito,
sino recibimiento o despedida.
La palabra es el resumen del silencio,
del silencio, que es resumen de todo.

 
PAZ (JAIME TORRES BODET)

No nos diremos nada. Cerraremos las puertas.

Deshojaremos rosas sobre el lecho vacío

Y besaré en el hueco de tus manos abiertas,

La dulzura del mundo, que se va, como un río.


HABITACIÓN EN NUEVA YORK - EDWARD HOPPER

SOL DE LA MAÑANA - EDWARD HOPPER
LOS CUATRO ACUERDOS DE LA SABIDURÍA TOLTECA

EL QUINTO ACUERDO

¡Sé escéptico!

Es común aceptar las cosas con mucha facilidad, sobre todo cuando las dicen personas que gozan de nuestra simpatía o admiración. 

Esto nos hace cometer errores de opinión y aceptar como verdad 

pensamientos que muchas veces son sólo opiniones sin fundamentos.













DEBAJO PRESENTAMOS VARIANTES EN SU MAYORÍA HUMORÍSTICAS DE LA LEYENDA JAPONESA CITADA AL COMIENZO DE ESTE POST 































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